top of page

¿Cero corrupción?

  • Stalin Vargas
  • 1 jun 2015
  • 2 Min. de lectura

El 15 de enero de 2.007, cuando el economista Rafael Correa Delgado se posesionó como Presidente de la República del Ecuador, señaló que ¨el segundo eje de la revolución ciudadana es la lucha contra la corrupción, mal enraizado en nuestra sociedad, pero también exacerbado por modelos, políticas y doctrinas que ensalzaron el egoísmo, la competencia y la avaricia como el motor del desarrollo social¨[1]. A continuación, y con todo el énfasis posible, dijo: ¨para esa lucha contra la corrupción hemos buscado y seguimos buscando los mejores hombres y mujeres que, con manos limpias, mentes lúcidas y corazones ardientes por la Patria, dirijan las diferentes instituciones del Estado y, desde ahí, con todo el respaldo político de la Presidencia de la República, eliminen, con su ejemplo y su consagración ciudadana, este nefasto mal¨.

Los ecuatorianos que escucharon el mensaje se mostraron satisfechos con esa propuesta, pero la dura realidad es que con el pasar de los días, meses y años, la lucha contra la corrupción ha quedado solo en el discurso oficial, pese a las evidencias, las filmaciones, las declaraciones, la colocación de cámaras de vigilancia.


delgado-culpable_250_300.png


Las instituciones encargadas como la Secretaría de Transparencia y Lucha contra la Corrupción y el Consejo de Participación Ciudadana han hecho muy poco, si a esto le sumamos que según el consejero David Rosero, el Estado "recortó el presupuesto para la lucha anticorrupción y la medición de la transparencia en las instituciones del Estado para 2015, hay una reducción del 62% para la Secretaría de Transparencia y Lucha contra la Corrupción, así de USD 361.230 solicitados a USD 135.785 aprobados. También se recortó arbitrariamente recursos para el proyecto llamado Índice de Transparencia, cuyo objetivo era medir la transparencia de todas las instituciones públicas. El CPCCS solicitó al Ministerio de Finanzas USD 3´658.821 dólares pero se aprobó apenas 65.000 dólares, una reducción del 98% del presupuesto planificado"[2].

Varias han sido las denuncias, muy pocas investigadas, la mayoría archivadas y otras que duermen en los despachos de los jueces, esperando sentencia. Casos emblemáticos como el del comecheques, la narcovalija (que a decir del Canciller es acción de la CIA), las ambulancias con sobreprecio, el desvío de fondos en varios ministerios, el título falso del primo del presidente, el caso Duzac, la copia de la tesis de grado del vicepresidente, la compra de chalecos para los motociclistas, los contratos del hermano del presidente, el call center del IESS, la adquisición de colchones especiales para personas con discapacidad, las transferencias por 22,8 millones de dólares de bancos de China a dos personas supuestamente vinculadas con el vicepresidente Jorge Glas[3].


Estos y otros casos no han tenido de parte del Ejecutivo la disposición y urgencia para hacer realidad el discurso inicial, ahora que baja la credibilidad del Presidente, el apoyo popular a la gestión del correato, es que empiezan a ¨denunciar¨ y tomar ¨medidas radicales¨. ¿No será que es una nueva cortina de humo para esconder los verdaderos actos de corrupción?

[1] Discurso de Posesión del Presidente dela República, Econ. Rafael Correa, 2007.

[2] http://www.planv.com.ec/historias/politica/deudas-pendientes-la-lucha-anticorrupcion/pagina/0/1

[3] http://www.planv.com.ec/historias/politica/glas-conmina-paez-probar-denuncia-sobre-transferencias/pagina/0/3


 
 
 

Comments


Unidad Popular 2016

Copyright © 2016 Diseño y soporte por Estrella Roja Multimedia

bottom of page